Hoy les vengo a entregar mi innecesaria opinión de lo que es, probablemente, una de las mejores películas y verdadera joya del cine coreano, La Doncella o por su título original 아가씨 (romanizado a Ahgassi).
La película, la cual se estreno en 2016, fue presentada bajo la siguiente introducción:
“Sookee es una joven que, en la Corea de los años treinta, es contratada para servir como doncella en la casa de una rica heredera japonesa. Hideko, que vive recluida en una gran mansión bajo la influencia de un tirano, desconoce que, en realidad, la doncella está involucrada en un complot para estafarla.”
Si no haz leído antes una reseña sobre esta película, la introducción realmente es la superficie de un buen elaborado drama, con actores de categoría y basado en un libro llamado Falsa Identidad, de la autora feminista Sarah Waters, el cual se baso en un romance lésbico y era ambientado en la época victoriana pero para esta entrega coreana se llevó a la época de la colonización de Corea del Sur por parte de Japón.
Aunque Corea del Sur no es conocida por ser la más LGBTIQ-friendly, muchos consideraron ésta película como un empujón hacia la tolerancia de la homosexualidad en dicho país asiático cuando nominaciones a la palma de oro del festival cinematográfico como lo es Cannes, el cual muchos consideran el más prestigioso de este arte le fueron dadas y premios como el BAFTA a mejor película extranjera le fueron entregados. Grabada en lo que las actrices sintieron como un ambiente de confianza en las escenas eróticas, con todo el personal fuera del set (¡hasta el mismo director!) mientras se realizaban las escenas al desnudo de las dos protagonistas, haciéndola acogida entre la comunidad LGBTIQ por diferenciarse de otros títulos famosos que mostraban el tema de la homosexualidad como lo fue The Blue Is The Warmest Color, la cual fue más criticaba por la actitud abusadora del director hacia las protagonistas que otra cosa.
Disponible en latinoamérica en Netflix, son unos buenos 145 minutos invertidos de streaming en la plataforma, con tonalidades más allá que solo la erótica, se puede notar la química y evolución de los personajes sin tener que ver las partes sexuales si a eso se le tiene miedo, aunque se perdería un poco la esencia de la misma, seguiría siendo una película que valdría la pena de ver y recomendar por lo anteriormente dicho.
Heidi Morales Toro
Hanadultalk@gmail.com
1 comentario en “La Doncella: el arte del erotismo”