Luego de comentar sobre lo sencillo que se veía el nuevo diseño de las carátulas del comeback de GOT7, alguien que ni conocía me escribió en privado a decirme qué tan poco fan era y cómo no valoraba el esfuerzo del grupo. Hoy les diré por qué todos deberíamos tener una opinión objetiva y no aceptar trabajos sin calidad.
La industria del K-pop, como ella misma se describe, es un gran comercio de música basada en Corea y en los últimos años en busca de la globalización, ha mejorado mucho la calidad de los productos ofrecidos por ésta, como son los conciertos, videos musicales, firma de autógrafos, música, entre otros; en general, el K-pop es un producto vendido a las masas, es música popular coreana y nosotros somos los clientes fieles.
Los fanáticos jugamos un papel fundamental en la globalización del género y con nuestras opiniones definimos el futuro de los artistas, la cual generalmente se traduce en ventas de álbumes, parafernalias y boletas para conciertos; si no nos gusta algo no vamos a comprarlo y esto se traduce en una crítica la cual se muestra en forma de estadísticas en éstas empresas y determina cómo evoluciona dicho producto en el futuro dependiendo de la demanda que presente.
Cuando eres fanática de un grupo, no significa que tienes que aceptar todo lo que la empresa presenta de este, la calidad del producto debe ser lo que primero se tenga en cuenta la hora de tomar la decisión de comprarlo y así se ahorraría contenido basura producido ya en cantidades exorbitantes en la industria. Al igual que cancelan programas de entretenimiento o son mejorados por bajo rating, así deberían ser mejorados los productos que consumimos de los protagonistas de la ola coreana.
Al fin y al cabo somos clientes y debemos exigir un buen producto por lo que estamos pagando, que si eres alguien que tiene la facilidad para poder obtenerlos, la cantidad de dinero que le inviertes a estos hace que crees una mente crítica sobre ellos y pienses dos veces antes de comprar un álbum con música repetitiva, un DVD que ya se transmitió o un tiquete para un concierto donde se cantarán las mismas canciones que el año pasado.
Criticar al diseño de la carátula o lo pobre que se ve de planeado el set del video musical, no me hace menos fans ni menos merecedora de poder comprar sus productos, al contrario, exigir calidad a la mercancía que fabrica la empresa, más no los idols, beneficia directamente al idol en sí, ya que hace al producto un preferido y le da más relevancia comercial.
Heidi Morales Toro
Hanadultalk@gmail.com