Sociedad

Mujeres sobrantes: ¿Mi valor está en el matrimonio?

Por: Alma Alcántara López

En cada reunión familiar no puede faltar la tía incómoda que pregunta “¿Y el novio sobrina?”, “¿Para cuándo la boda?” o “¿Ya están planeando los hijos?”, si eres como yo y respondes que aún no tienes pareja rematan con un “No se te vaya a pasar el tren”. Sin embargo, todo esto no suena tan mal cuando descubres que hay un lugar donde el mismo gobierno toma ese lugar de tía y presiona a sus ciudadanas a casarse: China. Pero, antes de entrar de lleno, tenemos que regresar unos años para comprender el panorama general del asunto. 

La política de un solo hijo

La política del hijo único fue una medida que se aplicó desde 1979 con el objetivo de reducir la natalidad en China y frenar su crecimiento demográfico. A finales de los 70’ la población se aproximaba a los 1.000 millones y el gobierno se vio preocupado por los posibles impactos que eso tendría en sus planes de crecimiento económico, por ello se les permitía a las familias el nacimiento de un solo progenitor. Debido a la preferencia por los hijos varones, la norma ocasionó el abandono de millones de niñas, abortos selectivos por género e incluso infanticidios femeninos. Como consecuencia, se provocó un serio desequilibrio de género en el país, inclinando la balanza hacia el lado masculino: en 2020 se contabilizaron 34,9 millones más hombres que mujeres.

A finales del 2015 se abolió dicha política y se les permitió a las familias tener 2 hijos “como respuesta proactiva al envejecimiento de la población” según el 13º Plan Quinquenal. Sin embargo, la expansión no funcionó como se esperaba y la natalidad no se alzó de manera significativa. En 2020 China registró tan solo 12 millones de nacimientos, el número más bajo desde 1960, con una tasa de natalidad del 1.3, por lo que se anunció una nueva actualización: ahora se puede tener hasta 3 hijos. Pero tampoco se están obteniendo los resultados deseados. En 2021, la Oficina Nacional de Estadísticas reportó un desplome de natalidad registrando tan solo 10,62 millones de nacimientos, siendo el nivel más bajo desde la fundación en 1949 de la República Popular China. Ante este panorama, la pregunta que todos se hacen es ¿por qué no están naciendo más niños? Además del coste exorbitante de la maternidad, los altos precios en el mercado inmobiliario y los componentes que provocan un estilo de vida inestable, el gobierno está señalando otra “problemática”: las llamadas “mujeres sobrantes”.

Mujeres sobrantes

“Sheng-nu” (剩女), traducido literalmente como “mujer sobrante”, es un término despectivo propagado a partir del 2007 por la prensa refiriéndose a mujeres educadas, solteras y mayores de 25 años. Utilizado excesivamente por la misma sociedad, la expresión incita al hostigamiento contra dichas mujeres con el objetivo de que se esfuercen en su búsqueda de una pareja y la procreación de hijos, tal como lo menciona Chihling Liu a The Conversation : “La etiqueta se inventó deliberadamente para frenar el creciente número de mujeres solteras en una sociedad tradicional que a veces considera que no casarse es una transgresión moral”. También es común que se refieran a ellas como “mujeres con tres altos” que alude a chicas que poseen alto cargo, alto nivel de formación y alto salario, pero contrario a lo que se pueda creer, contiene tintes denigrantes.

Pero… ¿Por qué las mujeres ya no desean casarse o tener hijos?

Gracias al surgimiento de movimientos y protestas feministas en China, cada vez más mujeres se priorizan antes que cumplir los cánones sociales y dan preferencia al desarrollo de su vida profesional y a su crecimiento personal antes de formar una familia, pues la noción de éxito ya no reside en casarse o dejar descendencia. Otro factor importante es que en las grandes empresas existe una gran competitividad y poca flexibilidad ante las mujeres embarazadas, “La realidad es que no hay muchos buenos trabajos para las mujeres, y las mujeres que tienen buenos trabajos querrán hacer lo que sea necesario para mantenerlos ¿Quién se atrevería a tener hijos en esta situación?” apunta un usuario en Weibo.

Por otro lado, con el aumento del costo de vida, las mujeres prefieren lograr la estabilidad antes que traer a otro ser humano al mundo: “La renuencia de la gente a tener hijos no radica en el proceso de tenerlos, sino en lo que viene después” (Dra. Mu Zheng). Según un informe del Instituto de Investigación de Población YuWa, en 2019 criar a un niño hasta los 18 años costaba alrededor de 485,000 yuanes (alrededor de 76,000 dólares), cifra que escalaba hasta el millón de yuanes en zonas como Shanghai o Beijing. 

Un peligro para el gobierno

¿Por qué el gobierno está tan preocupado por que las mujeres decidan no contraer matrimonio y en especial no tener hijos? La tasa de fecundidad refleja “el número de nacimientos que se producen en un año por cada 1.000 mujeres de entre 15 y 49 años, que se considera la edad fértil femenina”. Una tasa ideal sería de 2.1, pues permite un crecimiento poblacional normal, si es menor, el tamaño de la población comienza a disminuir. Lo peligroso es que el índice caiga por debajo de 1.5, en ese caso el país entra en una trampa de baja fertilidad. Recordemos que actualmente China tiene una tasa de fecundidad de 1.3.

Por otro lado, el 18.7% de la población total son personas mayores a 60 años y se estima que para 2050 más de un cuarto de la población tendrá más de 65. El envejecimiento poblacional trae diversas problemáticas: hay menor población activa aportando a la economía y mayor exigencia de atención social y médica para adultos mayores, lo que interfiere en el alza económica que China venía registrando. 

Si no se revierte esta situación China envejecerá rápidamente llegando a un punto de no retorno y perdiendo su fuerza laboral. El jefe de la Oficina Nacional de estadísticas, Ning Jizhe, apunta a la “disminución en el número de mujeres en edad fértil, una disminución continua en la fertilidad, cambios en las actitudes hacia la maternidad y retrasos en el matrimonio de los jóvenes” como las principales razones y peligros por los cuales China se encuentra en su posición crítica. 

El Gobierno se hace de diversas formas para mantener activo el término e incentivar al acoso contra estas mujeres. La creación de artículos en All-China Women’s Federation, una asociación que supuestamente vela por la emancipación y desarrollo de la mujer, es un gran ejemplo de ello. En uno de sus reportajes titulado “Las mujeres sobrantes no merecen nuestra simpatía” (2011) podemos leer: “Las chicas guapas no necesitan mucha educación para casarse con una familia rica y poderosa. Pero las chicas con una apariencia media o fea lo tendrán difícil. Estas chicas esperan seguir estudiando para aumentar su competitividad. La tragedia es que no se dan cuenta de que, a medida que las mujeres envejecen, valen cada vez menos. Así que cuando obtienen su maestría o doctorado, ya están viejas, como perlas amarillentas”.

Pero hay una estrategia en particular que me ha impactado: la creación de caricaturas

Leftover women 2
En la imagen se aprecia una “balanza”. Del lado izquierdo, un corazón que tiene escrita la palabra “amor” (爱情). Del lado derecho, una chica que, gracias al peso de su canasta, está abajo de la balanza. En las bolsas negras que cargan peso se lee “alto nivel de formación académica” (高学历), “alto salario” (高收入), y “buen aspecto” (貌美). Ella exclama “¡No es justo!” (不公平啊), y los trozos que llenan su cesta dicen "mujer sobrante".
Leftover women 5
En esta caricatura se muestra una mujer en la cima de una torre, vestida con una toga de graduación, un birrete y sosteniendo lo que pareciera ser su diploma universitario. Se muestra en medio de una ventisca y en la leyenda de la torre se lee “Mujer sobrante busca pareja para casarse”. En el suelo se muestran dos hombres que, a diferencia de ella, están muy cómodos y abrigados diciendo "Es demasiado culta" y "Tiene demasiado éxito".

Lo que en otras partes del globo se podría considerar factores aplaudibles, indispensables para el éxito (nivel de educación alto, altos cargos en el trabajo, mejor preparación profesional), para las mujeres en China son razones de recriminación. 

Pero ¿cómo es que este tipo de imágenes funciona en la población? Hay una teoría que lo explica. En el libro “Dinámica de grupos: investigación y teoría” (Cartwright y Zander, 1951), específicamente en el capítulo 11, nos explica lo siguiente: ante la formación de un grupo los lideres crearán, con base en su realidad social, conceptos de lo “correcto” y lo “incorrecto” que protegen la uniformidad y por ende el futuro de la agrupación. Ante aquellos miembros que se desvían, el grupo aplica castigos con el fin de proteger su homogeneidad y en el mejor de los casos readmitir al miembro desviado, ya habiendo pasado por el castigo, reconociendo su error y readaptándose a los estándares propuestos y aceptados por la mayoría. Ver los efectos del castigo funciona como incentivo para que los demás miembros del grupo prefieran adaptarse a los estándares, tratando de evitar ese destino, ganando la aprobación de otros y obteniendo satisfacción de hacer lo debido. 

En este caso los líderes del grupo, el gobierno, crean castigos, las caricaturas y la perpetuación del término, con el fin de que la misma sociedad ejerza presión hacia aquellas mujeres para que vuelvan a estar en concordancia con lo establecido “correcto”. 

Si tienes ganas de conocer más a fondo la realidad de “mujeres sobrantes” te recomiendo el siguiente documental hecho por la BBC en su serie “WHY Stories”. Dirigido por Shosh Shlam y Hilla Medalia sigue el día a día de Qiu Hua Mei y Gai Qi, dos mujeres que, independientemente de sus exitosas carreras, siguen siendo etiquetadas como “mujeres sobrantes” y se enfrentan a comentarios como “Tienes mucho carácter, debes ablandarte”, “Deberías seguir el camino que toma la gente común” o “No eres hermosa en el sentido tradicional y ya estás vieja, no creas que estás en una buena posición”.

Para el término de la filmación, Qiu Hua Mei reflexiona: “Si no estás casada, no eres normal. Cualquiera puede hablar mal de ti. Siento que hay muchas voces a mi alrededor. Quiero tener una vida sin esas voces. Sólo para vivir mi vida. Es difícil. Creo que es como las mujeres chinas en los viejos tiempos que tenían los pies atados… China es como esos zapatos, un talle más pequeños. No importa lo grandes que sean tus pies, tienes que apretarlos para que entren. A una mujer de corazón pequeño que sueñe con una familia le podrán quedar cómodos. Pero yo tengo pies grandes y me gusta correr. Tengo tantos sueños que cumplir. Siento que mis pies son demasiado grandes, no caben en esos zapatos. Duele. No quiero usarlos…”

Las mujeres sobrantes son el legado de una sociedad patriarcal. Un 30% de los hombres chinos se rehúsa a casarse con una mujer que tenga un grado de educación superior, mayor inteligencia o mejor trabajo, ante eso China alienta a las mujeres a ser “menos” para que los hombres sigan siendo “más”. Huang Yingying nos comparte: “Los hombres desean ‘casarse a la baja’. Existe la opinión de que los chicos de calidad A encontrarán mujeres de calidad B, los de calidad B encontrarán mujeres de calidad C y los de calidad C encontrarán mujeres de calidad D. Los que sobran son las mujeres de calidad A y los hombres de calidad D. Así que, si eres una mujer sobrante, eres de calidad A”. Debo admitir que no me agrada mucho lo que dice Huang porque en primer lugar nadie debería ser etiquetado en una “calidad”, pero retrata muy bien la realidad de la república. 

La mayoría de la sociedad china sigue creyendo que una mujer soltera no está completa. Es simplemente triste y aterrador que se señale a mujeres brillantes por el hecho de que, según la tradición, los hombres tienen que ser más brillantes. China, como un ente completo, debería dejar vivir libremente su sexualidad a cada integrante de la población, sin ningún tipo de estigma o coerción.

Anuncio publicitario

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s